Cecilia Catalina Cuevas Reyes, subadministradora de Comercio Exterior de la Aduana de Piedras Negras, fue ejecutada en la calle Abasolo, a escasos metros del Puente Internacional número Uno.
La funcionaria aduanera salía del cruce internacional cuando fue alcanzada, a la altura de la calle Morelos, por otro vehículo desde donde sujetos no identificados le dispararon al menos en seis ocasiones.
Cuevas Reyes viajaba en un vehículo oficial de la Aduana, una camioneta Dod-ge Ram 2500, doble cabina, placas EU 62348, dentro de la cual quedó su cuerpo inerte, tras recibir al menos un balazo que le arrebató la vida.
Según se apreció en el lugar de los hechos, la camioneta recibió al menos cinco disparos de arma de fuego, así como uno más que se impactó en la fachada de un consultorio dental, metros atrás de donde quedó finalmente la unidad.Al lugar acudieron efectivos de la Fiscalía del Estado, a cargo del delegado Santos Vázquez, de la Región Norte Dos, así como elementos del Ejército Mexicano, la Policía Municipal, la PGR y la Policía Investigadora del Estado.
La unidad que conducía la víctima se estrelló contra la fachada de una casa de cambio, casi al llegar al cruce de la calle Abasolo con Padre las Casas en la Zona Centro.
La Fiscalía activó el Código Rojo para tratar de ubicar a vehículos sospechosos sin que se presentaran resultados hasta ahora.
Cuevas Reyes tenía 34 años y se desempeñaba en el cargo desde hacía siete meses, cuando fue transferida de la Aduana de Tijuana.
Los detalles del ataque
La funcionaria federal fue brutalmente asesinada casi en pleno centro de la ciudad de Piedras Negras, por un grupo de sujetos cuando se dirigía a revisar dos “trailas” procedentes de Estados Unidos.
La fiscal iba en una camioneta del Gobierno federal junto con tres empleados más y a dos cuadras de la aduana se les acercó un vehículo, desde donde hombres armados le dispararon.
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